Un caballo sanador de 17 años con el don de percibir a las personas que sufren de enfermedades. Es la historia de Peyo que junto con su entrenador Hassem, dejaron a tras los espectáculos para dedicarse a acompañar a pacientes con enfermedades terminales gracias a sus extraordinarias capacidades empáticas.
Fue en el año 2016, cuando Hassem se percato que Peyo, después de los espectáculos al reunirse con el publico elegía a personas enfermas.
Su presencia transforma de lleno la habitación transmitiéndoles paz y energía que necesita el paciente.
Cuatro años de estudios científicos, demostraron que Peyo tiene la capacidad instintiva para percibir desde sufrimiento hasta tumores en los pacientes.
Peyo a cuidado mas de 1000 personas desde que inicio su carrera de caballo sanador.