El súper delegado del Gobierno Federal en Jalisco, Carlos Lomelí, ha tejido una extensa red de empresas que en los últimos 13 años le han permitido obtener contratos por hasta 7 mil millones de pesos con 17 Gobiernos estatales y el federal.
El giro principal de Lomelí ha sido la proveeduría de medicamentos, pero también ha incursionado en otras ramas como la inmobiliaria y de publicidad.
Una investigación de Reforma documenta 21 sociedades anónimas y tres asociaciones civiles vinculadas al funcionario federal y que opera a través de familiares, socios y empleados.
En la asociación civil Instituto de Prácticas de Microcirugía y Endoscopia uno de sus socios es Ramiro López Elizalde, subdirector de Evaluación en el ISSSTE.
En algunos casos es notable cómo quienes han sido o son sus socios en empresas a la vez tienen vínculos o cargos en Morena.