Los talibanes representantes del Talibán se mostraron moderados y comprensibles en su primera rueda de prensa desde que el grupo se hizo con el control total de Afganistán el domingo.
Los principales mensajes enviados a la comunidad internacional pasaron por el deseo de mantener relaciones pacíficas con otros países y el respeto a los derechos de las mujeres, aunque siempre «en el marco de la ley islámica«.
«No queremos que nadie se vaya del país», dijo el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid. «Tampoco queremos que los jóvenes abandonen Afganistán. Estos son nuestros activos».
«Va a haber una amnistía. No habrá ninguna venganza», señaló Mujahid al tiempo que extendía este perdón a todos los afganos que trabajaron con las fuerzas estadounidenses y sus aliados en el país.
La ofensiva del Talibán se produjo en medio de la retirada de las tropas estadounidenses y extranjeras después de 20 años de operaciones militares que no evitaron el rápido colapso de las fuerzas gubernamentales.
Después de 20 años de lucha hemos liberado [el país] y expulsado a los extranjeros. Este es un momento de orgullo para toda la nación», dijo Mujahid flanqueado por otros dos miembros de la organización.
«Hemos perdonado a todos los que han luchado contra nosotros en aras de la estabilidad y la paz en Afganistán. Han terminado las animosidades. No queremos enemigos externos o internos», añadió el portavoz.